Revelaciones del silencio
II la luz que entra por la ventana a esta hora la luz que deja un rastro blanco sobre la mesa blanca llena de rayajos la luz que acaricia la palma de mis manos y a la que yo no puedo acariciar la luz que nada dice y a la que yo no tengo nada que decir la luz que se queda un rato conmigo cálidamente en silencio E.